El pulso paradojal se produce debido a alteraciones en la dinámica del llenado y vaciado del corazón, particularmente en relación con las variaciones de presión intratorácica durante la respiración.
El mecanismo principal detrás del pulso paradójico es la interacción anormal entre los ventrículos derecho e izquierdo en respuesta a las variaciones de presión intratorácica durante la respiración. En condiciones patológicas, cualquier factor que impida la expansión adecuada del ventrículo derecho o que aumente excesivamente el retorno venoso durante la inspiración puede resultar en un desplazamiento exagerado del tabique interventricular hacia la izquierda. Esto reduce el volumen de llenado del ventrículo izquierdo y disminuye el volumen sistólico y la presión arterial sistólica de manera significativa durante la inspiración, manifestándose como un pulso paradójico.
En resumen, el pulso paradójico se produce cuando hay una interferencia significativa en la dinámica normal del llenado ventricular y la transmisión de presiones intratorácicas al corazón, resultando en una disminución anormal de la presión arterial sistólica durante la inspiración.
El pulso paradojal es una disminución anormal de la presión sistólica durante la inspiración. En condiciones normales, la presión arterial puede disminuir ligeramente durante la inspiración debido a cambios en la presión intratorácica, pero en el caso del pulso paradojal, esta disminución es exagerada, superando los 10 mmHg.
¿Cómo detectamos al Pulso Paradojal?
Debemos medir la presión arterial, inflando el manguito del esfigmomanómetro hasta un nivel superior a la presión sistólica esperada.
Se desinfla lentamente el manguito mientras se escucha con el estetoscopio los sonidos de Korotkoff. Se toma nota de la presión en la que se escuchan los primeros sonidos de Korotkoff solo durante la espiración. Se continúa desinflando hasta que los sonidos sean audibles tanto durante la inspiración como la espiración.
La diferencia entre estas dos mediciones de presión sistólica (la de la espiración y la de la inspiración) es la medida del pulso paradojal.
El pulso paradojal es un signo clínico que puede estar asociado con varias condiciones clínicas, entre ellas:
Taponamiento Cardíaco: El líquido acumulado en el pericardio ejerce presión sobre el corazón, limitando su capacidad de llenarse adecuadamente durante la diástole. Durante la inspiración, la presión intratorácica disminuye, pero el líquido en el pericardio impide que el ventrículo derecho se expanda adecuadamente para acomodar el aumento de retorno venoso. Como resultado, el tabique interventricular se desplaza hacia la izquierda más de lo normal, comprimiendo el ventrículo izquierdo y reduciendo su volumen de llenado (precarga) y, por ende, el volumen sistólico y la presión arterial sistólica disminuyen. Este mecanismo exagera la caída de la presión arterial sistólica durante la inspiración, produciendo el pulso paradojal.
Pericarditis Constrictiva: La inflamación crónica del pericardio puede llevar a la formación de tejido cicatricial, que restringe el movimiento del corazón, impidiendo la expansión adecuada de los ventrículos. Similar al taponamiento, la reducción en la capacidad del ventrículo izquierdo para llenarse durante la inspiración resulta en una caída notable de la presión arterial sistólica.
Asma Grave y Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC): Durante exacerbaciones severas, las grandes fluctuaciones en la presión intratorácica pueden llevar a un pulso paradojal marcado. El esfuerzo respiratorio aumentado y la retención de aire en los pulmones pueden generar grandes fluctuaciones en la presión intratorácica. Estas grandes variaciones pueden alterar significativamente el retorno venoso y la dinámica ventricular, contribuyendo a una caída marcada de la presión arterial sistólica durante la inspiración.
Embolismo Pulmonar: En casos de embolia pulmonar masiva, la presión elevada en las arterias pulmonares provoca una sobrecarga de volumen y presión en el ventrículo derecho, afectando su llenado. Simultáneamente al caer el volumen sistólico del ventrículo derecho y por otro lado, la desviación del septum interventricular a la izquierda, provocan una reducción de la precarga del ventrículo izquierdo, llevando a una disminución del volumen sistólico del ventrículo izquierdo durante la inspiración, resultando en un pulso paradojal.
Shock Hipovolémico: En etapas avanzadas, la reducción severa del volumen sanguíneo puede provocar pulso paradojal debido a la disminución del retorno venoso y del llenado ventricular. Las variaciones en la presión intratorácica durante la respiración pueden exagerar esta condición, causando una disminución significativa en la presión arterial sistólica durante la inspiración.