La ventilación protectora pulmonar ha sido el principal apoyo en el manejo del síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA) causado por la infección por SARS-CoV2 (C-ARDS), similar al SDRA por otras causas. Debido a la persistencia de hipoxemia severa durante C-ARDS, medidas adyuvantes tales como el decúbito prono (DP) se han utilizado con frecuencia y buenos resultados. Además de la limitación de los volúmenes corrientes, es muy importante el monitoreo de la presión de manejo o driving pressure (DP) y presiones de meseta y la selección individual de presión positiva al final de la espiración (PEEP). Sin embargo, el DP requiere de un equipo de profesionales capacitado, entrenado y no está exento de riesgos; complicaciones como extubación endotraqueal, obstrucción o desplazamiento del tubo endotraqueal, lesiones oculares, parálisis del plexo braquial y úlceras por presión faciales y torácicas han sido descritas.
Las maniobras de reclutamiento son técnicas diseñadas para mejorar la oxigenación al reabrir y manteniendo abiertas zonas no aireadas de los pulmones. Las maniobras de reclutamiento clásicas se basan en la aplicación de altas presiones, generalmente a través de una inflación sostenida o un aumento gradual de presión inspiratoria y/o de PEEP sobre un período suficiente de tiempo. Claramente, exponen al paciente a consecuencias hemodinámicas. Un ensayo clínico aleatorizado reciente que utilizó el enfoque gradual describió importantes complicaciones de las altas presiones, y el brazo usando el abordaje a pulmón abierto tuvo mayor mortalidad.
El decúbito lateral no requiere la aplicación de presiones más altas. Sin embargo, ha sido principalmente aplicado en la neumonía unilateral para mejorar la oxigenación mejorando la ventilación del pulmón enfermo colocado hacia arriba. En lesiones pulmonares bilaterales como C-ARDS, el decúbito lateral realizado en pasos secuenciales podrían actuar como una maniobra de reclutamiento para cada pulmón secuencialmente siempre que se proporcione suficiente PEEP para evitar el des reclutamiento. Los diferentes efectos del eje gravitacional en cada pulmón durante el decúbito lateral pueden modificar la presión transpulmonar regional (PTP) pudiendo ayudar a volver a expandir las regiones colapsadas. Esta maniobra postural de reclutamiento de las partes dependientes de los pulmones se pueden administrar sin cambios en las presiones aplicadas en las vías respiratorias o la necesidad de colocar al paciente en decúbito prono completamente.
En trabajos de investigación clínica esta maniobra de reclutamiento postural fue efectiva y resultó en una reexpansión pulmonar que se mantuvo al menos 30 minutos después de regresar a la posición supina indicado por la mejora en la puntuación de aireación pulmonar evaluada por ultrasonido, así como por técnicas de impedancia transtorácica y oxigenación.
Estos beneficios se lograron sin necesidad de presurizar los pulmones del paciente, y el los cambios de decúbito son bien tolerados en términos de estabilidad hemodinámica y de intercambio gaseoso.
Se desconocen los efectos a largo plazo de esta maniobra, este procedimiento hasta que no haya investigación con mayor evidencia definitiva no debe considerarse una alternativa al DP.