La injuria renal aguda (IRA) es una de las complicaciones más comunes y más graves en el paciente crítico. Las terapias de soporte renal (TSR) son eso, SOPORTE, no reemplazan ni mucho menos curan la IRA. Por supuesto que frente a situaciones como anuria, hiperkalemia, acidemia severa, nadie duda de iniciar TSR, sin embargo, en otro contexto es controvertida la decisión de iniciar precoz o tardíamente las TSR. En 2017 se publicaron dos trabajos acerca de esta controversia, con conclusiones opuestas sobre si iniciar una TSR precozmente es beneficioso.
Desafortunadamente es dificultoso predecir los requerimientos de TSR y existe una amplia variación entre los médicos de cuándo iniciar las TSR.
Recientemente se ha validado un test, el “test de estrés de la Furosemida” en pacientes con estadio 1 y 2 según las normas KDIGO (Kidney Disease Improving Global Outcome) como un test predictor de progresión al estadio 3 de la clasificación KDIGO, necesidad de TSR y muerte hospitalaria.
El Test de Estrés de la Furosemida serviría para indicarnos cuando iniciar las TSR?
El test de estrés de Furosemida se realiza indicando Furosemida endovenosa 1 mg/Kg en pacientes que nunca recibieron furosemida o 1.5 mg/Kg en aquellos pacientes con historia de haber recibido furosemida dentro de los últimos 7 días de la valoración del paciente en al Unidad de Cuidados Críticos (UCC). Se mide la diuresis horaria, y si esta es mayor a 200 ml en las dos posteriores, se considera que el paciente es respondedor a la Furosemida, infiriendo que la función tubular esta conservada. Si el FU es menor a 200 ml en dos horas, se considera al paciente no respondedor. El test de Furo es confiable en predecir que pacientes van a requerir de TSR.
Muchos autores proponen iniciar las TSR cuando el test de Furosemida es negativo (precoz) mientras otros, prefieren aguardar a que la oliguria sea más pronunciada, kalemia igual o mayor de 6 mE/L. Acidemia con un pH de 7.15 o menor y bicarbonato menor de 12 mEq/l-
Sin embargo, pareciera que la mortalidad no varía cuando se decide por una u otra conducta, ni tampoco en la recuperación renal. El momento óptimo de iniciar TSR aún queda por ser establecido, probablemente una vez más debamos emplear el concepto de “un traje a medida”. El uso del biomarcador N-GAL colabora en la toma de decisiones, sobre todo en pacientes no respondedores al test de Furo en predecir que pacientes van a requerir TSR.